Es necesario que este homenaje al pueblo judío “sea un acto de lo que nunca debe olvidarse y de un compromiso para que no se repita”, dijo el Presidente de Uruguay, Tabaré Vázquez, en transmisión simultánea de radio y televisión en el Día Internacional de Conmemoración Anual en Memoria de las Víctimas del Holocausto. “Nunca más, en ninguna circunstancia ni en ningún lugar y contra ningún grupo humano”, enfatizó el mandatario.
“Nuestra memoria a las víctimas del Holocausto es, además de una obligación de nunca más, un compromiso de trabajo por un porvenir mejor que también ellos anhelaron”, enfatizó Vázquez en su mensaje en esta conmemoración, establecida en 2005 por la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas.
Añadió que es “importante” recordar con actos especiales a las víctimas del Holocausto cada 27 de enero, que coincide con el día de 1945 en que las fuerzas aliadas soviéticas liberaron el complejo de campos de concentración y exterminio de Auschwitz-Birkenau montado por el régimen alemán nazi tras invadir Polonia en 1939, al comienzo de la Segunda Guerra Mundial.
De este modo se evita que pase desapercibido “o se limite a una evocación protocolar”, señaló Vázquez.
El mandatario recordó “un magistral y conmovedor” ensayo del historiador medievalista francés de origen judío March Bloch quien expresó que “la incomprensión del presente es producto del desconocimiento del pasado”. Esta frase figura en un pasaje de “Introducción a la Historia”, escrito durante su encarcelamiento en un cuartel de la Gestapo nazi cerca de Lyon, Francia, por su militancia en la Resistencia (guerrilla antinazi) antes de ser fusilado el 16 de junio de 1944.
“A juzgar por muchos datos de la realidad del mundo actual, parecería que la humanidad desconoce o se empeña en desconocer su propio pasado o pretende conocerlo no como realmente fue sino como le gustaría que hubiera sido”, puntualizó Vázquez siguiendo esa línea de pensamiento. Desde su punto de vista, esto puede explicar “tanta incomprensión del presente y desaprensión respecto al futuro”.
El régimen alemán nazi y sus colaboradores asesinaron durante la Segunda Guerra Mundial (1939-1945) a unos seis millones de hombres, mujeres, niñas y niños de origen judío, en un intento por aniquilar sistemáticamente a esa comunidad de Europa.
En el marco de la misma concepción racista, las huestes lideradas por Adolf Hitler persiguieron y mataron a millones de personas de otros grupos sociales, como los gitanos, los minusválidos, opositores políticos, homosexuales y a miembros de muchos otros colectivos de Alemania y países invadidos.
Para mostrar la importancia de la memoria, el Presidente Vázquez recordó a Ana Valov, nacida en Uruguay en 1930 de una pareja de inmigrantes judíos que volvió con su familia a Hungría poco antes de estallar la guerra. Tras la invasión nazi a ese país fue tomada prisionera junto a su madre y hermana y recluida en el campo de concentración de Auschwitz, donde murió en 1944.
“En Ana, nuestro homenaje a todas las víctimas del Holocausto. A las que murieron, pero también a las que habiendo sobrevivido dejaron parte de su vida en aquel infierno”, expresó.
El mandatario agregó que este homenaje es fundamental “porque las cosas no pasan en vano y porque el pasado nunca descansa en paz”. “Esperamos un futuro mejor y confiamos en nuestra capacidad para construirlo”, afirmó.
“En nuestro oficio de vivir, el pasado es una herencia que recibimos sin haberla pedido, esperado ni elegida sino simplemente es como es”, reflexionó.
En ese sentido, recordó a la filósofa alemana-estadounidense Hannah Arendt (1906-1975), quien dijo que el “pasado no es una carga sino una fuerza hacia el futuro”.