El prosecretario de la Presidencia, Juan Andrés Roballo, aseguró que este congreso es un hito para relanzar las políticas de salud y contribuir a preservar el valor de la vida humana, en una reunión que congregará durante tres días en Montevideo a 22 ministros de Salud y 380 participantes que representan a 94 países.
También agradeció a la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) el reconocimiento a Uruguay por las transformaciones y el compromiso en el trabajo contra las enfermedades no transmisibles.
El ministro de Salud Pública, Jorge Basso, enmarcó a esta conferencia en las recomendaciones de la OMS para colocar en el debate público mundial a estas enfermedades, calificadas como el problema de salud de la humanidad.
Explicó que las enfermedades no transmisibles tienen relación con hábitos y costumbres de vida, tales como el consumo de tabaco, la alimentación no saludable y la inactividad física, que llevan al desarrollo de enfermedades cardiovasculares, respiratorias, cáncer y diabetes. Para revertir esta situación se necesita la aplicación de políticas públicas de salud y trabajar a nivel educativo con las nuevas generaciones para disminuir estos factores de riesgo.
En el marco de los Objetivos de Desarrollo Sostenible hacia el 2030, la OMS prevé la disminución en un tercio de las muertes provocadas por estas enfermedades.
El representante de la OPS/OMS en Uruguay, Giovanni Escalante, destacó que la Conferencia Mundial de Enfermedades No Transmisibles es vital para la promoción de la salud mundial, así como para lograr coherencia y compromiso en las políticas sanitarias.
Finalmente, el asesor de la OMS Guy Fones reconoció el liderazgo mundial de Uruguay en esta temática, obtenido en base a políticas públicas concretas y la voluntad de seguir avanzando en la materia.