Tras la primera reunión en Montevideo, los países integrantes del Grupo de Contacto Internacional (GCI) sobre Venezuela resolvieron promover conversaciones a fin de establecer en ese país las garantías necesarias para un proceso electoral libre en el menor tiempo posible. Además, se acordó negociar para que se permita la entrega urgente de asistencia de acuerdo a los principios internacionales de ayuda humanitaria.
“Este conjunto de países que aboga por una salida pacífica y democrática para Venezuela ha tenido conclusiones que están en una declaración final”, comenzó explicando el canciller de Uruguay, Rodolfo Nin Novoa, en una conferencia de prensa junto a la vicepresidenta y alta representante para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad de la Unión Europea, Federica Mogherini, realizada este jueves 7 al término del encuentro de delegados de 14 países.
El GCI sobre Venezuela, “consciente de la severidad de la crisis actual en Venezuela y su impacto en la región (América Latina) y profundamente preocupados por la difícil situación de su pueblo (…) apunta a forjar un abordaje común para apoyar una solución política pacífica y democrática y propiamente venezolana, excluyendo el uso de la fuerza a través de elecciones presidenciales libres, trasparentes y creíbles, de acuerdo a la Constitución”, expresó Nin Novoa.
“Para que Venezuela pueda superar la presente crisis es crucial restaurar la plena democracia, el estado de derecho, la separación de poderes y el respeto por el mandato constitucional por las instituciones del país, más particularmente la democráticamente elegida Asamblea Nacional (parlamento)”, agregó.
El canciller uruguayo informó que, para el Grupo de Contacto, “las libertadas y los derechos humanos de todos los venezolanos deben ser respetados, deplora los muertos y heridos causados por el excesivo uso de la fuerza y subraya que el uso de la fuerza no es nunca una solución”.
“En su primera reunión, este grupo analizó la situación de Venezuela y analizó cómo podría ayudar para encontrar un camino pacífico, que pueda conducir a la celebración de nuevas elecciones presidenciales, con todas las condiciones y garantías necesarias, en conformidad con la Constitución”, leyó.
La declaración establece además que “el GCI reconoce la crisis humanitaria que se continúa profundizando día a día y que afecta a millones de venezolanos”. Así, expresó su compromiso de desplegar más asistencia en aéreas de más necesidad y coordinar su entrega en conjunto con el representante especial del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados y la Organización Internacional de Migraciones, Eduardo Stein.
El grupo estableció, además, proceder a realizar los contactos necesarios con los actores venezolanos relevantes, así como con los socios regionales e internacional con el objetivo de establecer las garantías necesarias para un proceso electoral creíble en el menor tiempo posible y permitir la entrega urgente de asistencia de acuerdo a los principios internacionales de ayuda humanitaria.
“A efectos de implementar ambas metas, el Grupo de Contacto Internacional enviará una misión técnica al país”, añade el documento. Asimismo, se anunció la convocatoria a una nueva una reunión ministerial a comienzos de marzo para analizar su desarrollo.
La declaración fue adoptada por Uruguay, Unión Europea, Costa Rica, Ecuador, España, Italia, Portugal, Suecia, Alemania, Francia, Países Bajos y Reino Unido.
DECLARACION FINAL ---- 7 DE FEBRERO
REUNIÓN DEL GRUPO DE CONTACTO INTERNACIONAL
Conscientes de la severidad de la crisis actual en Venezuela y de su impacto en la región y profundamente preocupados por la difícil situación de su pueblo, el Grupo de Contacto Internacional (GCI) sobre Venezuela mantuvo su primera reunión en Montevideo el día 7 de febrero de 2019.
El GCI apunta a forjar un abordaje internacional común para apoyar una resolución pacífica, política, democrática y propiamente venezolana de la crisis excluyendo el uso de la fuerza a través de elecciones presidenciales libres, transparentes y creíbles, de acuerdo a la Constitución venezolana.
Para que Venezuela pueda superar la presente crisis, es crucial restaurar la plena democracia, el estado de derecho, la separación de poderes y el respeto por el mandato constitucional de las instituciones del país, más particularmente la democráticamente electa Asamblea Nacional.
El GCI destaca que las libertades fundamentales y los derechos humanos de todos los venezolanos debe ser respetada. Deplora los muertos y heridos causados por el excesivo uso de la fuerza y subraya que el uso de la violencia no es nunca una solución.
En su primera reunión, el Grupo analizó la situación del país y discutió sobre como el Grupo podría ayudar para encontrar un camino pacífico que pueda conducir a la celebración de nuevas elecciones presidenciales con todas las condiciones y garantías necesarias en conformidad con la Constitución, como fuera establecido en los términos de referencia del GCI.
El GCI también reconoce la crisis humanitaria que se continúa profundizando día tras día, afectando a millones de venezolanos. El Grupo expresó su compromiso de desplegar más asistencia en áreas de necesidad y coordinar su entrega en conjunto con el Representante Especial de la ACNUR/OIM, Sr. Eduardo Stein.
Para dicho fin, el GCI, a través de sus co-presidentes de esta reunión, procederán con los contactos necesarios con los actores venezolanos relevantes así como con los socios regionales e internacionales con el objetivo de: I) establecer las garantías necesarias para un proceso electoral creíble, en el menor tiempo posible, II) permitir la entrega urgente de asistencia de acuerdo a los principios internacionales de ayuda humanitaria.
A efectos de implementar ambas metas, el Grupo enviará una misión técnica al país.
El GCI convocará nuevamente una reunión a nivel ministerial a comienzos del mes de marzo para analizar el desarrollo
La declaración ha sido acordada por los siguientes miembros del Grupo Internacional de Contacto: Uruguay, Unión Europea, Costa Rica, Ecuador, España, Italia, Portugal, Suecia, Alemania, Francia, Países Bajos, Reino Unido.