La Dirección de Medio Ambiente utiliza un drone y software para dar seguimiento al reingreso de la arena que se expande hacia la ruta y está siendo devuelta a la playa. Por otra parte, ya se instalaron 35 cercas captoras para recuperar las dunas y se lleva a cabo una exhaustiva limpieza junto a personal del Programa Jornales Solidarios de Zona Oeste.
Esta tecnología “permite calcular el volumen de arena que se tenía en su momento y donde está quedando ahora al reinsertarla en el espacio costero”, indicó la directora de Medio Ambiente, Bethy Molina.
La jerarca agregó que el proceso para estabilizar las dunas llevará “dos o tres años y tendrá que repetirse”, mientras que “ahora estamos haciendo la tarea más dura que consiste en reingresar la arena limpia a la playa”.
El objetivo de las tareas es dar una solución a la problemática que afecta los balnearios de San Francisco, Punta Colorada y Punta Negra en Piriápolis.
Paralelamente, con la colaboración de trabajadores que integran el Programa Jornales Solidarios, se desplegó un plan de limpieza para retirar plásticos, alambres y palos de las antiguas cercas captoras. El supervisor de Aseo Urbano en Zona Oeste, Nicolás Pagola, confirmó que “se sacaron cuatro camiones completos”.
Para la protección del área de dunas “trajimos unos 70 camiones con ramas”, las cuales se están colocando en los puntos indicados por la Dirección de Medio Ambiente.
Mientras que las autoridades esperan que con estas medidas se reduzca el impacto que sufre la zona cada vez que se presentan condiciones climáticas adversas, ya se informó que la semana que viene se implementarán acciones similares en Punta Negra.
La intervención está a cargo de la Dirección de Obras y Talleres de la IDM, al tiempo que la Dirección de Medio Ambiente se encarga de controlar que se cumpla con las normativas medioambientales que fueron comunicamos previamente a la Dirección Nacional de Medio Ambiente (DINAMA).