Maldonado recupera un espacio emblemático y gana en calidad de vida, así como un lugar de convivencia y creación de ciudadanía. La Administración Antía destinó 2,5 millones de dólares para que los vecinos del departamento y visitantes puedan disfrutar de su tiempo libre en instalaciones acordes a las exigencias y necesidades actuales.
Mediante esta recuperación y puesta en valor, los hijos de Maldonado y turistas podrán interactuar en El Jagüel con entrada gratuita durante todo el año.
“Hoy es un buen día porque pedí a gritos la recuperación de este espacio público”, fue la frase con la que inició su alocución el intendente de Maldonado, Enrique Antía, en el acto de reinauguración del parque.
Agregó que “la gente no tenía dónde ir con sus hijos” y que esta obra era “una obligación para nosotros porque estamos recuperando el patrimonio que es para todos nosotros”. El entusiasmo del jefe comunal quedó expresado al indicar que prevé concurrir al parque en compañía de sus nietos para disfrutar de las renovadas instalaciones. Al cierre, el jerarca puntualizó que "esto es para festejar y agradecer el trabajo de todos. Es la plata del pueblo para el disfrute del pueblo".
El evento se llevó a cabo este viernes 28 de diciembre ante la presencia de autoridades, funcionarios, prensa nacional y extranjera, así como vecinos.
Accesible, inclusivo, de vanguardia y totalmente gratuito
Las mejoras del Parque El Jagüel son muchas y de gran relevancia: de las tres hectáreas iniciales pasó a abarcar un total de 18; juegos de madera confeccionados por carpinteros locales y los de alta tecnología que están diseñados con otros tipos de materiales; reconstrucción de un viejo edificio que funcionará como salón de exposiciones y en el que se dictarán cursos y talleres gracias a un acuerdo con la Dirección General de Cultura de la IDM; construcción de dos baterías de baños accesibles: sistemas de saneamiento (algo que no existía hasta el momento) y riego; estacionamiento para más de 300 vehículos; calles, cordones y veredas; un completo sistema de iluminación; cerramiento total; más áreas verdes con reserva de plantas nativas y cañada; y la instalación de un helicóptero con la ayuda de las Fuerzas Armadas de Uruguay.
Todas estas prestaciones se desarrollan con acceso absolutamente gratuito para los vecinos del departamento como también para sus visitantes.
El parque permanecerá abierto desde las 8 hasta las 20 horas, y en invierno se prevé cerrar algún día para la realización del mantenimiento, informó el director general de Higiene y Medio Ambiente de la IDM, Jorge Píriz.
Otra de las grandes novedades la comunicó el propio intendente: se contará con el trabajo de jóvenes egresados de Guardaparques del Polo Educativo Tecnológico (PET) Arrayanes en el entendido de que se deben cuidar y mantener los espacios públicos.
Macro proyecto
El parque forma parte un proyecto aún más grande que se extiende hasta el puente de La Barra. En breve se prevé terminar con el asentamiento El Placer, por lo que actualmente se realizan las obras de vialidad, además de una pasarela en ese puente -para esto último, se efectuó una licitación-.
En otro espacio público se contará con un predio específico que será destinado al ciclismo y karting, y también se revalorizará el Parque Indígena al precisar de tareas de mantenimiento y puesta en valor.
El director de Espacios Públicos, Ruben Peréz señaló que consiste en una revolución urbana que comienza en El Jagüel y culmina en El Placer. A su vez, añadió que se trata de la penúltima obra del año al indicar que la última será la del Paseo de las Américas que también tendrá lugar este viernes.
Un poco de historia
Este espacio permanece en el recuerdo de varias generaciones al ser un germinador de historias durante la vida de los habitantes de Maldonado y los turistas.
El encargado de recapitular los años de El Jagüel fue el subdirector general de Cultura, Fernando Cairo, al expresar que “todo comenzó en 1900 en lo que se conoció como Rincón del San Rafael mediante la plantación de especies no autóctonas tomando 104 hectáreas donde los vecinos mandaban a su ganado a pastar”. De esta forma, se dio inicio al bosque municipal que se empezó a utilizar como lugar de recreación; con ese fin, “se crearon caminos, canchas, un anfiteatro, y en 1938 se instaló un bar y confitería llamado El Jagüel” y que de ahí tomó su nombre el parque, según señaló Cairo.
Recién en la década de 1980 se tallaron las clásicas figuras de madera destinadas a los niños y que hicieron célebre al parque.
El Jagüel es el parque más antiguo del departamento, y hoy obtuvo su merecido reacondicionamiento luego de tantos años de espera.